bueno, de no ser por las bajas temperaturas 😉
hoy, tras dormir unas buenas horas, me puse en marcha en plan espontáneo con la bici… Esto de estar soltero y sin compromiso significa que puedo demostrarme a mi mismo que se ha terminado eso de ser un tío amargado y falto de motivación. Aquellas cosas que me gustaba hacer hace años siguen estando ahí, y me siguen pareciendo igual de chulas.
Bueno, tampoco es que la bicicleta me ponga igual de a tono a mis 40 tacos que a los 15… para que nos vamos a engañar.
P.S. aunque no se vea, llevo una bandana verde en torno a la cabeza, una bala colgando al cuello y unas zapatillas de baloncesto cutres en plan años ochenta que te cagas… además de una pinta de matón de barrio que no sé yo.. y eso que iba a un muy buen colegio 😉
Creo que la foto fue tomada cuando tenía 15 ó 16 años.. si hoy intentanse hacer lo mismo, igual me caía del muro ese. Por otro lado sería muy chulo volver a encontrar el sitio exacto y sacar una foto igual… me pongo con ello!!
En defininitiva, que hacía un pelín por encima de los 10 grados y me fuí a dar un paseo con la bici, siguiendo el Nidda (el río que tengo cerca de casa). Todo el mundo que usa la bici piensa que el Nidda es muy bonito, y que se puede descender hasta su desembocadura en Höchst.. Pues nada, ahí que me fuí. Puedo confirmar que es muy bonito, y perfecto para irse de pique-nique.
Al final, unos 34 km… incluyendo una parada para despedirme de mis hijos en la estación, que se iban con su madre a Reims, de vacaciones de Semana Santa.
El resultado es que da gusto salir a tomar el aire y el sol, y aunque el hacer deporte sigue sin ser lo mío, por lo menos aún me puedo defender lo suficiente como para ponerme moreno sobre la bici.
P.S. Mi amigo David no llamaría a esto ponerse moreno, sino «quemarse el pico»..
Pues a mí me parece que mi hijo sigue en forma y pronto estará mucho mejor.Sigue así. te quiere tu «MADRE».